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Saturday, March 3, 2012

La enfermedad y su circunstancia

Confieso que trato de evitar los filmes sobre cáncer.  Una de las principales razones es que en su inmensa mayoría resultan unas bombas lacrimógenas inverosímiles que manipulan la enfermedad para acentuar el melodrama en tramas nada originales. Ejemplo de ello pueden ser Love Story, Stepmom o Sweet November. Obviamente unas dejan cierta huella, otras son completamente olvidables. Una excepción es la reciente comedia 50/50, dirigida por Jonathan Levine e interpretada magistralmente por Joseph Gordon-Levitt y Seth Rogen, que trata con humor sardónico los aspectos más delicados del enfrentamiento al diagnóstico y tratamiento de la enfermedad y se sale con la suya, manteniendo su dignidad artística.

Por la razón anterior fue que solo tras mucho titubeo cauteloso me decidí a ver Declaration of War (La Guerre Est Déclarée). Dirigida por la actriz Valérie Donzelli y escrita por la propia Donzelli y el actor Jérémie Elkaim (The Pornographer), la película trata sobre dos jóvenes que se conocen en una discoteca, comparten una pastilla de éxtasis, se enamoran y tienen un hijo. Deciden vivir juntos para dedicarse a criarlo cuando a los 18 meses se le diagnostica un tumor cerebral canceroso. A partir de ahí la trama se dedica a explorar los seis años siguientes de la vida de esta pareja, sobre todo los dos primeros, en los cuales viven las incertidumbres del periodo de diagnóstico, las altas y bajas de los inicios del tratamiento, enfrentan las diferentes actitudes de familiares y amigos, asi como los efectos que todo esto tiene en su propia relación.

Los protagonistas del filme se llaman Romeo y Julieta (con todas las connotaciones horribles que esto pudiera tener, desde cursilería hasta maldición kármica, la presentación está hecha en forma casual y humorística), son interpretados por Jérémie y Valérie en cuya verdadera historia se basa el guión. Lo que pudo ser una fórmula perfecta para el desastre, se convierte en ficción con efectividad dramática y credibilidad argumental.

Los personajes están bien trazados. No son seres humanos extraordinarios ni se hacen extraordinarios al enfrentar una situación difícil. Al contrario, son dos jóvenes bien comunes que sacan fuerzas de sus propias debilidades para enfrentar, de la mejor manera posible, lo que se les viene encima. Aquí no hay didactismo ni cantos de esperanza. Romeo y Julieta dan palos de ciego y pasan del pesimismo al optimismo y del disfrute a la frustración tal y como se vive en la cotidianidad, con transiciones sutiles a veces, abruptas a ratos, pero siempre inesperadas para si mismos. La trama es raras veces predecible. Los actores de reparto son excelentes y los personajes están bien delineados, llenos de temores, sin heroísmo, pero por lo general, de buen corazón.  Aquí, eso sí, todos ponen al mal tiempo sus mejores caras. Es un triunfalismo habitual con el cual nadie resalta.

Los autores evitan la melodramatización y utilizan con acierto un humor negro del cual ellos mismos son mayormente las víctimas. No piden la conmiseración del espectador. Han declarado una guerra contra la enfermedad y contra todos los obstáculos que se les presenten a sabiendas de que no tienen mucho control sobre los resultados, pero están decididos a lidiar. Es un canto contra la derrota y el derrotismo. Conmueven sin dejar que se pueda sentir lástima por ellos.

No es una película perfecta ni una obra maestra, a veces peca de un cierto exceso de corrección política, pero es que quizá asi piensan los propios personajes en la vida real, y tiene esa ya demasiado frecuente influencia de Jacques Démy en el cine francés de los últimos diez años, en los cuales los personajes de repente comienzan a cantar lo más desafinadamente posible. Pero por esta vez, su imperfección es una virtud y ayuda a aceptar la tragedia que sutilmente se narra. Donzelli y Elkaim han atravesado una cuerda floja con un malabarismo exitoso. Lo que pudo ser un lamento lastimero y solemne, resulta una comedia ligera que muestra a los seres humanos descubriéndose y sorprendiéndose en su lucha contra la adversidad, desgastándose, sobreponiéndose, dubitativos, impotentes a veces, pero siempre tratando de darle una oportunidad a la vida. Si algo se destaca aquí es la incomprensión del ser humano por la muerte.


Declaration of War (Francia 2011). Dirigida por: Valérie Donzelli. Guión: Valérie Donzelli y Jérémie Elkaim. Con: Valérie Donzelli, Jérémie Elkaim, Brigitte Sy, Elina Lowensohn, Michele Moretti, Phillipe Laudenbach y Frédéric Pierrot. Se estrena actualmente en algunas ciudades de los Estados Unidos y puede obtenerse a través de IFC On Demand.


Roberto Madrigal

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